lunes, 30 de septiembre de 2024

Gloria Fuertes. El hada acaramelada

El hada acaramelada,
de pequeña atolondrada
pues soñaba con ser hada
de cucurucho y varita.

Su madre doña rosita,
dándole beso tras beso,
le dijo: nada de hada,
¡que ya no se lleva eso!

Cómo vas a ser un hada
con ese flequillo tan tieso
y esos ojos de ratón,
si ya no se lleva eso?

- Somos pobres, no hay castillo,
tu padre suda en el trillo,
yo sudo en el lavadero...

(La niña lloró sobre la cesta de ropa
y la cesta se llenó de pipas y caramelos)

Con un periódico se hizo
un cucurucho muy tieso,
de esta forma se sentó
a la puerta del colegio

con su cesta milagrosa,
con su varita de fresno
para espantar a las moscas
del puesto de caramelos.

"¡Todo gratis, todo gratis!"
se leía en un letrero.

Un día que era muy frío,
me parece que era enero,
el hada se quedó helada
y vinieron los bomberos.

En marzo se desheló;
con cucurucho y varita
volvió al puesto.

"¡Todo gratis!" regalaba
yoyoes y caramelos...
el hada, cuanto más daba
más se le llenaba el cesto.

El hada acaramelada
la llamaban y la llaman
todos los chicos del pueblo.



De "El hada acaramelada"
    

domingo, 29 de septiembre de 2024

Gioconda Belli. Dolor de los espejos

No es sino con temor
que una mujer se aproxima
día a día hasta el espejo
y se tercia con la propia imagen.
Llega la hora de los hechizos
y las brujas.
Hora de los cosméticos y las abluciones,
la nostalgia ante las fotos luminosas
de la nada eterna juventud.
Entonces uno se pregunta
cuánto más durará la pasión,
el amor por las bicicletas
y los cuentos de amantes furtivos.
Uno se pregunta si el amor tendrá edad,
si el tiempo será tan implacable
como los espejos. 



(De Apogeo, 2000)


En la antología "Poesía soy yo.
Poetas en español del siglo XX (1886-1960)"
    

sábado, 28 de septiembre de 2024

Gabriela Mistral. La otra

Una en mí maté:
yo no la amaba.
   
Era la flor llameando 
del cactus de montaña;
era aridez y fuego;
nunca se refrescaba. 
   
Piedra y cielo tenía 
a pies y a espaldas
y no bajaba nunca
a buscar "ojos de agua".
   
Donde hacía su siesta,
las hierbas se menoscaban
de aliento de su boca
y brasa de su cara.
   
En rápidas resinas
se endurecía su habla,
por no caer en linda
presa soltada.
   
Doblarse no sabía 
la planta de montaña,
y al costado de ella,
yo me doblaba.
   
La dejé que muriese,
robándole mi entraña.
Se acabó como el águila
que no es alimentada.
   
Sosegó el aletazo,
se dobló, lacia, 
y me cayó a la mano
se pasea acabada.
   
Por ella todavía
me gimen sus hermanas,
y las gredas de fuego
al pasar me desgarran.
   
Cruzando yo les digo:
-Buscad por las quebradas
y haced con las arcillas
otra águila abrasada. 
   
Si no podéis, entonces
ay! olvidadla.
Yo la maté. Vosotras
también matadla!



En la antología "Las renegadas"

viernes, 27 de septiembre de 2024

Eunice Odio. Aprisionada por la espuma

I

Aprisionada en cárceles de espuma,
en la medida de tu cuerpo,
no veo pasar la noche,
sólo veo el día
que entra por tus axilas transparentes
y te desnuda.

Veo, amor mío,
el lecho donde estamos
y compartimos
las dádivas,
los cielos...
Todo lo que nos negó y afirmó como lo que somos:
mil años de alegría corporal
y materia sin sombra
y palabras
que se dicen diurnamente porque vienen del aire
y hay que oírlas y decirlas
a través de los árboles
y en lo que no se escribe porque aún no se inventa su nombre;
porque su júbilo
todavía no ha sido descubierto
y las flores de su alrededor
aún no son cosas del viento
(aún no han ido a un invierno ni regresado a la primavera).



Poemas publicados en zona franca
En una antología


jueves, 26 de septiembre de 2024

Clara Janés. Fugacidad de lo terreno

Todo es de polvo, soledad y ausencia.
Todo es de niebla, oscuridad y miedo.
Todo es de aire, balanceo inútil,
    sobre la tierra.
   
Manos vacías que acarician viento,
ojos que miran sin saberse ciegos,
pies que caminan sobre el mismo trecho
    siempre de nuevo.
   
Vemos sin ver y en la tiniebla estamos.
Somos y somos lo que no sabemos.
Hay en nosotros de la llama viva
    sólo un reflejo. 
   
Caen los días en otoño eterno.
Pasan las cosas entre suelo y sueño.
Llega la noche de la muerte. Y calla
    nuestro silencio.



De "Límite humano"
En "Movimientos insomnes"
   

miércoles, 25 de septiembre de 2024

Ethel Krauze. III

Una mujer tiene que practicar la llamada
      o el conjuro:
su combativa sangre
guarda los atributos del torbellino
o la polvareda.

Tiene que aprender el camino de regreso
a la casa de la Madre Salvaje
cuando se apague el fuego.
Saldremos, hermanas,
cuando se apague el fuego,
saldremos cantando
      hacia el caldero de la bruja sabia.
Que nos encienda el hueso de los ojos
con su antorcha de alas,
con sus garras
y su sombrero de media luna en la tiniebla.
Que nos encienda el musgo de las manos dormidas,
que nos enseñe cómo se parte el pedernal
      y se lanza en el aire
tejiendo un relámpago imborrable.



De "La otra Ilíada"


martes, 24 de septiembre de 2024

Ernestina de Champourcin. Búscame en ti. La flecha de mi vida...

Búscame en ti. La flecha de mi vida
ha clavado sus rumbos en tu pecho
y esquivo entre tus brazos el acecho
de las cien rutas que mi paso olvida.

Despójame del ansia desmedida
que abrasaba mi espíritu en barbecho.
El roce de tus manos ha deshecho
la audacia de mi frente envanecida.

Navegaré en tus pulsos. Dicha inerte
del silencio total. Ávida muerte
donde renacen, tuyos, mis sentidos 

Ahoga entre tus labios mi tristeza,
y esa quietud punzante que ya empieza
a taladrar mi sien con tus latidos.



De la antología "Breviario de los sentidos"

lunes, 23 de septiembre de 2024

Elizabeth Mulder. Y no más?

Es posible?
Esto sólo 
y no más?
Este lodo
amasado
con oro,
este lloro
apagado,
esto, todo,
y no más?
   
Esta angustia,
este miedo,
esta vida
ya mustia,
ya herida
de penas
apenas 
nacida
al acaso;
este ritmo,
este modo,
este paso,
esto, todo,
y no más?
   
Esto sólo 
que ahora es
por siempre jamás?
Imposible,
imposible!
Después
ha de haber más!



(Paisajes y meditaciones, 1933)


En "Rojo-Dolor. Antología de mujeres poetas en torno al dolor"

domingo, 22 de septiembre de 2024

Elena Garro. Mi cabeza cuarteada

Se cuartearon los muros.
Me cojo la cabeza entre las manos.
Ya es tarde.
Hay un estrépito
y la tierra me sale por los ojos.
Mi lengua sepultada entre escombros
no dirá ya
como sucedió la catástrofe.
A cuanto talismán recurro
cae hundido entre la tierra que cae de mi cabeza.
El polvo del derrumbe
empieza a sepultar mis hombros,
mi garganta, me llega hasta los pies.
Ya sólo soy un túmulo de tierra.



De "Cristales de tiempo"

sábado, 21 de septiembre de 2024

Dulce María Loynaz. La tristeza pequeña

Esta tristeza pequeña
que podría guardarse en un pañuelo...

Esta tristeza que podría echar
con las flores marchitas.

Que podría llevársela volando
el viento.

Y que no vuela.
Y que no se echa.
Y que no cabe ya en mí toda!



De "Versos"


viernes, 20 de septiembre de 2024

Dolores Catarineu. Que falso todo...

Que falso todo,
el cielo, el lucir
de sus estrellas
bajas!
el amor, el desamor,
qué falso todo!



De "amor, sueño, vida"

jueves, 19 de septiembre de 2024

Delmira Agustini. La cita

En tu alcoba techada de ensueños, haz derroche
de flores y de luces de espíritu; mi alma
calzada de silencio y vestida de calma,
irá a tí por la senda más negra esta noche.

Apaga las bujías para ver cosas bellas;
cierra todas las puertas para entrar la ilusión;
arranca del misterio un manojo de estrellas
Y enflora como un vaso triunfal tu corazón.

¡Y esperarás sonriendo, y esperarás llorando!...
cuando llegue mi alma, tal ves reces pensando
que el cielo dulcemente se derrama en tu pecho...

Para él, amor divino, ten un diván de calma
o con el lirio místico que es su arma, mi alma
Apagará una a una las rosas de tu lecho




miércoles, 18 de septiembre de 2024

Cristina de Arteaga. Por la estepa dolorosa...

Por la estepa dolorosa
los caminos polvorientos
van trazando su elegía
de soledad y silencios...
Por las almas siempre solas
como los campos desiertos,
por las almas relegadas
a los olvidos del tiempo;
solo transitan las sombras,
las sombras de los recuerdos!



En la "Antología de poetas españolas.
De la generación del 27 al siglo XV"
  

martes, 17 de septiembre de 2024

Concha Méndez. Nocturno

una plaza. la luna
juega con la noche.
y una campanada muda
mira desde su torre.

una fuente y una luz
decoran la rinconada.
más allá se ve un farol
y una reja iluminada.

el pueblo espera dormido
otra llegada del alba.
y, mientras espera, tiene
todas sus puertas cerradas.



En la antología "Peces en la tierra"


lunes, 16 de septiembre de 2024

Concha Espina. La música

Deleite cuya esencia en Dios germina,
con belleza sublime y generosa
vino al mundo en la brisa rumorosa,
en el ave de gracia peregrina,

en el mar sollozante, que reclina
sus espumas en playa rumorosa,
en el río, en la fuente bulliciosa...,
y el hombre oyó su música divina!

Al verse prisionero de su encanto
quiso rendirla en inmortal querella;
le dió la inspiración su fuego santo,

su corazón ferviente puso en ella,
y del amor en el augusto manto
floreció entre las artes, la más bella.



En "Safo en Castilla"

domingo, 15 de septiembre de 2024

Concepción de Estevarena. Ayer y hoy

-¿Qué es la existencia, y qué es un juramento?
-Te dije ayer, y respondiste tú-:
-Un juramento es dar la fe de un alma,
y la vida es amor, amor y luz.
Hoy, lo mismo que ayer, yo te pregunto
y sonriendo me respondes ya:
-Un juramento, un eco que se pierde;
la vida, horas que llegan... y se van.



De la Antología de Poetisas españolas
Tomo I: hasta 1900
De la editorial Torremozas

sábado, 14 de septiembre de 2024

Claribel Alegría. Otredad

Me gustan los espejos
porque observo
a la otra
que se quita la máscara y me reta.



De "Otredad"
    

viernes, 13 de septiembre de 2024

Circe Maia. Cambios

Unas veces el cambio se prepara
en forma subterránea pero estalla
de modo brusco, abierto:
nova en el cielo
grieta en la tierra
inundación de luz en plena noche
lengua de fuego
asoma sorpresivamente en la mirada
del otro, vuelto Otro, vuelto ajeno.
   
Otros cambios se gestan
imperceptiblemente. 
De una oscura manera
de un modo
silencioso
lo que no estaba está y lo que estaba
es destruido.
   
Pero tan gradualmente 
que siempre quedan restos:
de la mirada, alguna
chispa
alguna vez.
    
De la voz, algún eco
(Palabra no enfriada
todavía).



De "Cambios, permanencias"
En "Transparencias"
    

jueves, 12 de septiembre de 2024

Carmen Plaza. Violación

al ladrón le doy la llave,
con polvos blancos encubro mi palidez.
Marina Tsevetáieva 

La saña entró en la casa
como en un cuerpo inerme.
En cada miembro, las huellas del saqueo.
Solo cajas vacías.
   
Roba la vida, la esperanza,
para venderla a peso.
Ha despreciado
todo lo que no brilla, lo que no tiene precio,
el desconcierto, la impotencia,
el aire profanado,
lo que duele.



De "Manual de diosas"

miércoles, 11 de septiembre de 2024

Carmen Conde. Lluvia de mayo

¡Cuán hermosa tú, la desvelada!
Te lleva y te moldea dulce viento
encima de jardines y de estatuas.
Tu cuerpo es el de Venus en la orilla
eternamente mar dentro del alba.

Acude siempre a mí, séme propicia.
La fiesta de las hojas en sus ramas
te rinden los esbeltos soñadores
que en movibles racimos se levantan.

No tengo ni una flor... Sólo mi tronco
aloja por frutal una campana.
Lluvia que contemplo, melancólica:
no crezcas para mí. Vivo inundada.





De la antología de poetisas españolas
Tomo II: de 1901 a 1939
de la editorial Torremozas

martes, 10 de septiembre de 2024

Blanca Varela. Destiempo

IX

El amor es como la música,
me devuelve con la manos vacías,
con el tiempo que se enciende de golpe
fuera del paraíso.
Conozco una isla,
mis recuerdos,
y una música futura,
la promesa.
   
Y voy hacia la muerte que no existe,
que se llama horizonte en mi pecho.
Siempre la eternidad a destiempo.




En "Y todo debe ser mentira"

lunes, 9 de septiembre de 2024

Aurora de Albornoz. En la noche

La memoria 
no puede devolvernos el instante,
perdido
en el fondo de un vaso,
en una esquina de la noche,
en el mirar que no duró un segundo.
   
Duele
el hundir nuestras manos
para encontrar vacío.
Porque nuestra memoria ya no sirve.
   
Era 
una esquina
-dónde?-
de la noche,
o era el fondo de un vaso,
o el fondo del color de una mirada.
   
La memoria 
no puede devolverlo. 



De "En busca de esos niños en hilera"
En "Un trozo menudo de tiempo"

domingo, 8 de septiembre de 2024

Alfonsina Storni. Domingos

En los domingos, cuando están las calles
del centro quietas,
alguna vez camino, y las oscuras,
cerradas puertas
de los negocios, son como sepulcros
sobre veredas.

Si yo golpeara en un domingo d'esos
las frías puertas,
de agrisado metal, sonido hueco
me respondiera...
se prolongan luego por las calles
grises y rectas.

Qué hacen en los estantes, acostadas
las negras piezas
de género? Estantes, como nichos,
guardan muertas
cosas, de los negocios adormidos
bajo sus puertas.

Una que otra persona por las calles
solas, se encuentra:
un hombre, una mujer, manchan el aire
con su presencia,
y sus pasos se sienten uno a uno
en la vereda.

Detrás de las paredes las personas
mueren o sueñan?
camino por las calles: se levantan
mudas barreras
a mis costados: dos paredes largas
y paralelas.

Vueltas y vueltas doy por esas calles;
por donde quiera,
me siguen paredes silenciosas,
y detrás d'ellas
en vano quiero saber si los hombres
mueren o sueñan.




Del poemario "Languidez"

sábado, 7 de septiembre de 2024

Anay Sala Suberviola. Tenía razón Gloria

A Gloria Fuertes
  
Si no fuera tan cierto
este dolor que siento
provocaría risa.
Porque es para troncharse.



De "Ý (turno de réplica)"

viernes, 6 de septiembre de 2024

Alejandra Pizarnik. Origen

Hay que salvar al viento 
Los pájaros queman el viento
en los cabellos de la mujer solitaria
que regresa de la naturaleza
y teje tormentos
Hay que salvar al viento 



De "La última inocencia"
En "Poesía completa"

jueves, 5 de septiembre de 2024

Clara Lair. Nocturnos de Nueva York

I

Quién sostiene las luces que cruzan en la sombra
de ésta mi densa soledad tan rara!
Cuando el florón más tenue de la alfombra
se cambia en el contorno de tu cara!
Cruje una puerta... suenan unos pasos.
Es el viento, es la nada, es lo invisible!
Tú estás lejos de mí, fijo de brazos
ante mi grito ahogado a lo imposible!
Marca el reloj la hora en que no vienes...
No has de venir jamás, amado mío. 
Entre tú y yo está el hierro de mil trenes,
miles de piedras... y un atroz vacío.



De "Un amor en Nueva York"
En "De la herida a la gloria. Poesía completa"
    

miércoles, 4 de septiembre de 2024

Cristina Rivera Garza. 5

[La Probabilidad]

Hay que hacer trámites y firmar papeles.
Tenemos que autorizar la sierra que abrirá el abismo en el cráneo 
el filo del escalpelo que hunde y horada
la aguja que se llevará el líquido raquídeo a otro lugar
dejando al cerebro pequeño y seco como el interior de una nuez.
   
Tenemos que estar conscientes.
Escribir los nombres que tú creaste al pie de formatos desteñidos 
disculpando de antemano el error si ocurre o celebrando el azar 
que también puede ocurrir si dios tiene ganas 
si dios, por segunda vez, nos muestra el lado dulce de su cara.
Después Tenemos que esperar los designios de la probabilidad.
No podemos hacer más.
   


De "Los textos del yo"
En "Me llamo cuerpo que no está. Poesía completa"
  

martes, 3 de septiembre de 2024

Blanca Varela. IV

Deseos, piedras, cielo a jirones,
ni un ave.
Estoy huyendo.
Una nueva montaña,
un río joven, sin ira.
   
Este es el mundo que amo.
Quiero un cielo veloz,
la mañana distinta, sin colores,
para poner mis ángeles,
mis calles donde siempre hay humo y sorpresa.



De "Ese puerto existe"
De "Poesía completa"

lunes, 2 de septiembre de 2024

Ajo. 9

Cerrojos de ceniza
cicatrices con cremallera
y lágrimas de hojalata,
envuelto entre algodones
llevo yo lo que me falta.



De "Micropoemas 2"

domingo, 1 de septiembre de 2024

Pita Amor. Puerta obstinada

Si vosotros sabéis lo que es la noche,
os ruego que entendáis mi oscuridad.



De "Pita Amor. Un caso mitológico.
Antología de Guadalupe Amor"