La memoria
no puede devolvernos el instante,
perdido
en el fondo de un vaso,
en una esquina de la noche,
en el mirar que no duró un segundo.
Duele
el hundir nuestras manos
para encontrar vacío.
Porque nuestra memoria ya no sirve.
Era
una esquina
-dónde?-
de la noche,
o era el fondo de un vaso,
o el fondo del color de una mirada.
La memoria
no puede devolverlo.
De "En busca de esos niños en hilera"
En "Un trozo menudo de tiempo"
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